Cosas de casa
miércoles 28 de febrero de 2024
Dios te salve, José, lleno de la gracia divina.
Entre tus brazos descansó El Salvador y ante tus ojos creció.
Bendito eres entre todos los hombres, y bendito es Jesús, el hijo divino de tu Virginal Esposa.
San José, padre adoptivo de Jesús, ayúdanos en nuestras necesidades familiares, de salud y de trabajo, hasta el fin de nuestros días, y socórrenos a la hora de nuestra muerte.
Amén
Soy indigno y pequeño delante de Dios, por eso es hacia ti que dirijo mis oraciones, dejándote las penas y esperanzas de mi alma, pidiéndote humildemente …
V. | R. |
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Señor, ten piedad
Señor, ten piedad
Cristo, ten piedad
Cristo, ten piedad
Señor, ten piedad
Señor, ten piedad
Cristo, óyenos
Cristo, óyenos
Cristo, escúchanos
Cristo, escúchanos
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Dios, Padre celestial
Ten misericordia de nosotros
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Dios, Hijo, Redentor del mundo
Ten misericordia de nosotros
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Dios, Espíritu Santo
Ten misericordia de nosotros
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Santísima Trinidad, un solo Dios
Ten misericordia de nosotros
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Santa María, Ruega por nosotros San José Ilustre descendiente de David Luz de los patriarcas Esposo de la Madre de Dios Custodio del Redentor Custodio purísimo de la Virgen, Nutricio del Hijo de Dios Diligente defensor de Cristo Servidor de Cristo Ministro de la salvación Cabeza de la Sagrada Familia José, justísimo José, castísimo José, prudentísimo José, varón fuerte José, obediente José, fidelísimo, Espejo de paciencia Amante de la pobreza Modelo de trabajador Modelo de la vida doméstica Custodio de vírgenes Apoyo en las dificultades Columna de las familias Consuelo de los desdichados Esperanza de los enfermos Patrono de los exiliados Patrono de los afligidos Patrono de los pobres Patrono de los moribundos Terror de los demonios Protector de la Santa Iglesia. |
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Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
Perdónanos, Señor.
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Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
Escúchanos, Señor.
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Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
Ten misericordia de nosotros.
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Lo nombró administrador de su casa.
Y señor de todas sus posesiones.
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Oh, Dios, que con inefable providencia elegiste a San José como esposo de la santísima Madre de tu Hijo, concédenos que merezcamos tener como intercesor en el cielo al que veneramos como protector en la tierra.
Tú, que vives y reinas, por los siglos de los siglos.
Amén